Algunos versículos bíblicos que nos animan a estar alegres y confiados.
El corazón alegre hermosea el rostro;
mas por el dolor del corazón el espíritu se abate.
Proverbios 15:13
El corazón alegre constituye buen remedio;mas el espíritu triste seca los huesos.
Proverbios 17:22
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz.
En el mundo tendréis aflicción;
pero confiad, yo he vencido al mundo.
Juan 16: 33
Por tanto, oh varones, tened buen ánimo;
porque yo confío en Dios que será así como se me ha dicho.
Hechos 27:25
Esforzaos y cobrad ánimo;
no temáis, ni tengáis miedo de ellos,
porque Jehová tu Dios es el que va contigo;no te dejará, ni te desamparará.
Deuteronomio 31:6
Se alegrará el justo en Jehová, y confiará en él;
y se gloriarán todos los rectos de corazón.
Salmos 64:10
... Alégrese el corazón de los que buscan a Jehová.
Salmos 105:3
... A quién amáis sin haberle visto, en quién creyendo,
aunque ahora no lo veáis,
os alegráis con gozo inefable y glorioso...
1 Pedro 1:8
Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento,
guardará vuestros corazones y pensamientos en Cristo Jesús.
Filipenses 4:7
Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová,
y tome aliento vuestro corazón.
Salmos 31:24
...no os entristezcáis,
porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza.
Nehemías 8:10
Estad siempre gozosos. Orad sin cesar.
Dad gracias en todo,
porque esta es la voluntad de Dios
para con vosotros en Cristo Jesús.
1 Tesalonicenses 5:16-18
Aunque la higuera no florezca,
ni en las vides haya frutos,
aunque falte el producto del olivo,
y los labrados no den mantenimiento,
y las ovejas sean quitadas de la majada,
y no haya vacas en los corrales;
con todo, yo me alegraré en Jehová,
y me gozaré en el Dios de mi salvación.
Versículos Bíblicos: Generosidad Humana
Algunos versículos bíblicos que nos animan a ser generosos para con aquellos que se encuentran en necesidad.
Pero el generoso pensará generosidades,
y por generosidades será exaltado.
Isaías 32:8
No te niegues a hacer el bien a quien es debido,
cuando tuvieres poder para hacerlo.
No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, y mañana te daré,
cuando tienes contigo qué darle.
Proverbios 3:27-28
El alma generosa será prosperada;
y el que saciare, él también será saciado.
Proverbios 11:25
A Jehová presta el que da al pobre, y el que bien ha hecho,
se lo volverá a pagar.
Proverbios 19:17
El que cierra su oído al clamor del pobre,
también él clamará, y no será oído.
Proverbios 21:13
El que da al pobre no tendrá pobreza;
mas el que aparta sus ojos tendrá muchas maldiciones.
Proverbios 28:27
El pobre es odioso aun a su amigo;
Pero muchos son los que aman al rico.
Peca el que menosprecia a su prójimo;
Mas el que tiene misericordia de los pobres
es bienaventurado.
Proverbios 14:21
Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano
padecer necesidad, y cierra contra él su corazón,
¿cómo mora el amor de Dios en él?
Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua,
sino de hecho y en verdad.
1 Juan 3:17-18
¿No es más bien el ayuno que yo escogí,
desatar las ligaduras de impiedad,
soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados,
y que rompáis todo yugo?
¿No es que partas tu pan con el hambriento,
y a los pobres errantes albergues en casa;
que cuando veas al desnudo, lo cubras,
y no te escondas de tu hermano?
Entonces nacerá tu luz como el alba,
y tu salvación se dejará ver pronto;
e irá tu justicia delante de ti,
y la gloria de Jehová será tu retaguardia.
Isaías 58:6-8
...Si quitares de en medio de ti el yugo,
el dedo amenazador, y el hablar vanidad;
y si dieres tu pan al hambriento, y saciares al alma afligida,
en las tinieblas nacerá tu luz,
y tu oscuridad será como el mediodía.
Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma,
y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego,
y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan.
Y los tuyos edificarán las ruinas antiguas;
los cimientos de generación y generación levantarás,
y serás llamado reparador de portillos,
restaurador de calzadas para habitar.
Isaías 58:10-11
En todo os he enseñado que, trabajando así,
se debe ayudar a los necesitados,
y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo:
Más bienaventurado es dar que recibir.
Hechos 20:35
La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta:
visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones,
y guardarse sin mancha del mundo.
Santiago 1:27
El que cierra su oído al clamor del pobre,
también él clamará, y no será oído.
Proverbios 21:13
Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed,
y no me disteis de beber;
fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo,
y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.
Entonces también ellos le responderán diciendo:
Señor, ¿cuándo te vimos hambriento,
sediento, forastero, desnudo, enfermo,
o en la cárcel, y no te servimos?
Entonces les responderá diciendo:
De cierto os digo que en cuanto
no lo hicisteis a uno de estos más pequeños,
tampoco a mí lo hicisteis.
E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.
Mateo 25:42-46
Solamente nos pidieron que nos acordásemos de los pobres;
lo cual también procuré con diligencia hacer.
Gálatas 2:10
Pero esto digo: El que siembra escasamente,
también segará escasamente;
y el que siembra generosamente, generosamente también segará.
Cada uno dé como propuso en su corazón:
no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.
Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia,
a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente,
abundéis para toda buena obra...
2 Corintios 9:6-8
A los ricos de este siglo manda que no sean altivos,
ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas,
sino en el Dios vivo,
que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.
Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras,
dadivosos, generosos;
atesorando para sí buen fundamento para lo por venir,
que echen mano de la vida eterna.
1 Timoteo 6:18
Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida
y rebosando darán en vuestro regazo;
porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir.
Cundo ya no tengo nada que hacer quiero cambiar lo in cambiable, nuestras palabras “deje yo soy así”, y termino por aceptar todas mis imperfecciones como si fueran parte de mí; arraigadas formas, maneras de ser, pero que´ extraño, no me doy cuenta de ellas, solo las ven los demás yo convivo con mis fallas, mi mal temperamento, mis debilidades mi mal gusto, mi mal vocabulario, mi irritabilidad, incluso la venganza, la envidia, el resentimiento, el egoísmo, como darme cuenta si así voy por años, es una costra que suma mas y mas día adía, ella se adhiere, no la manifiesto como un retroceso, solo va sucediendo y en lugar de edificarme, me hace ver como un pedante de la era cuaternaria, pues es eso lo que se ve en mi, que soy del montón mal hablado, mal pensado mis estímulos reaccionan automáticamente a mi ya retrogrado sentimiento de defensa que no piensa para actuar o para responder, para contestar, “porque de la abundancia del corazón habla la boca”, que hay dentro de mi ser, que demanda de mi una reflexión exhaustiva de cómo me he formado, pues está comprobado que no hay nada más inútil que querer cambiar los modales de un adulto, salvo que él tome la decisión, que el ingeniero de la vida lo ayude,“Hijo mío, si recibes mis palabras y guardas en ti mis mandamientos, haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; si inclinas tu corazón a la prudencia, si invocas a la inteligencia y pides que la prudencia te asista; si la buscas como si fuera plata y la examinas como a un tesoro, entonces entenderás el temor de Jehová y hallarás el conocimiento de Dios, porque Jehová da la sabiduría y de su boca proceden el conocimiento y la inteligencia. Él provee de sana sabiduría a los rectos: es escudo para los que caminan rectamente. Él es quien guarda las veredas del juicio y preserva el camino de sus santos., Entonces comprenderás qué es justicia, juicio y equidad, y todo buen camino. Cuando la sabiduría penetre en tu corazón y el conocimiento sea grato a tu alma, la discreción te guardará y te preservará la inteligencia, para librarte del mal camino, de los hombres que hablan perversamente, de los que abandonan los caminos rectos para andar por sendas tenebrosas, de los que disfrutan haciendo el mal y se gozan con las perversiones del vicio, las veredas de los cuales son torcidas, y torcidos sus caminos. »Serás así librado de la mujer ajena, de la extraña que halaga con sus palabras, que abandona al compañero de su juventud y se olvida del pacto de su Dios, por lo cual su casa se desliza hacia la muerte, y sus veredas hacia los muertos. De los que a ella se lleguen, ninguno volverá ni seguirá de nuevo los senderos de la vida. »Tú así andarás por el camino de los buenos y seguirás las sendas de los justos; porque los rectos habitarán la tierra y los íntegros permanecerán en ella. En cambio, los malvados serán eliminados de la tierra, y de ella serán arrancados los prevaricadores.” Por ello tenemos una gran responsabilidad con nuestros hijos pues son la réplica de lo que somos,
“escucha, hijo mío, la instrucción de tu padre y no abandones la enseñanza
de tu madre, porque adorno de gracia serán en tu cabeza y collares en
tu cuello” ya se ha imprimido el carácter, luego el temperamento y hasta
nuestra personalidad, sea uno o diez hijos ellos son nuestra replica, todas
sus reacciones emociones y sentimientos están ligadas a lo que vieron en nosotros, nuestros actos, como tratamos a nuestra cónyuge si somos suaves o ásperos con los demás lo honestos que nos mostramos para con nuestro entorno, lo responsables a la hora de tomar decisiones, si hemos sido consecuentes con lo que decimos a la hora de actuar si cumplimos nuestras promesas, si somos reactivos o sumisos en respuesta a una acción, se ha establecido que todo ello es producto del entorno de una criatura desde el neonato hasta los doce o trece años de edad, pues ya en esta etapa nos confrontan con sus ideas como personas y toman decisiones y anhelan responsabilidades, por ello los maestros son participes de este estado de cosas, pues ellos como los padres son los que mayor tiempo están con los párvulos, niños y jóvenes, por ello un estado coherente de su responsabilidad social debe evaluar el cómo conviven los educadores de su sociedad, de ser ejemplo modelos de civismo bondad y buen comportamiento, pues son ellos y nosotros como formadores de hombres para el futuro quienes tenemos la responsabilidad de moldear a unos triunfadores, más que eso seres humanos íntegros, acrisolados en sus principios, honestos honrados, pues no basta con tener honestidad y no cumplir con las reglas básicas de civismo y educación con los demás con mi sociedad con mi patria, pues esta palabra conlleva como su nombre lo dice patria; patrimonio que es mi verdadera herencia para no solo mis descendencia sino con toda una nación, cuantos maestros acosados por sus convivencias cotidianas matrimonios disfuncionales, unos hijos en rebeldía, una pareja infiel y todas las situaciones que no ayudan a la salud mental de quienes tienen la autoridad moral de construir un país, pues quien más que un educador formador de hombres gobernantes, médicos jueces, magistrados, que digo toda una sociedad, por ello su bienestar debe ser parte integral del compromiso, como deber social del estado para dar un estilo de vida honroso y decoroso a sus maestros, quienes son forjadores de hombres pulcros bien informados, instruidos y sabios; “la sabiduría clama en las calles, alza su voz en las plazas; Clama en los principales lugares de reunión, a la entrada de las puertas de la ciudad dice sus razones: ¿Hasta cuándo, ingenuos, amaréis la ingenuidad? ¿Hasta cuándo los burlones desearán burlarse y los insensatos aborrecerán el conocimiento? ¡Volveos a mi reprensión!, pues ciertamente yo derramaré mi espíritu sobre vosotros y os haré saber mis palabras. Yo os llamé, pero no quisisteis escuchar; tendí mi mano, pero no hubo quien atendiera, sino que desechasteis todos mis consejos y rechazasteis mi reprensión; por eso, también yo me reiré en vuestra calamidad, me burlaré cuando os venga lo que teméis, cuando venga como una destrucción lo que teméis y vuestra calamidad llegue como un torbellino; cuando sobre vosotros venga tribulación y angustia” Hijo mío, está atento a mi sabiduría e inclina tu oído a mi inteligencia, para que guardes discreción y tus labios conserven la ciencia. Los labios de la mujer extraña destilan miel y su paladar es más suave que el aceite, pero su final es amargo como el ajenjo, agudo como espada de dos filos. Sus pies descienden a la muerte, sus pasos se dirigen al seol. Sus caminos no son firmes: no los conoce, ni considera el camino de la vida. »Ahora pues, hijos, escuchadme y no os apartéis de las razones de mi boca. Aleja de ella tu camino y no te acerques a la puerta de su casa, no sea que des tu honor a extraños, y tus años a alguien cruel; o no sea que los extraños se sacien de tu fuerza, que tus trabajos queden en casa ajena y que gimas al final, cuando se consuma tu carne y todo tu cuerpo, y digas: “¡Cómo pude aborrecer el consejo? ¿Cómo pudo mi corazón menospreciar la reprensión? ¡No escuché la voz de los que me instruían, ni a los que me enseñaban incliné mi oído! Casi en el colmo del mal he estado, en medio de la sociedad y de la congregación”. »Bebe el agua de tu propia cisterna, los raudales de tu propio pozo. ¿Acaso han de derramarse tus fuentes por las calles y tus corrientes de aguas por las plazas? Sean ellas para ti solo no para los extraños que estén contigo. ¡Sea bendito tu manantial y alégrate con la mujer de tu juventud, cierva amada, graciosa gacela! Que sus caricias te satisfagan en todo tiempo y recréate siempre en su amor. ¿Por qué, hijo mío, has de andar ciego con la mujer ajena y abrazar el seno de la extraña? Los caminos del hombre están ante los ojos de Jehová, y él considera todas sus veredas. Apresarán al malvado sus propias iniquidades, retenido será con las ligaduras de su pecado. Él morirá por falta de disciplina y errará por lo inmenso de su locura.